El excanciller mexicano recibió la Orden Francisco Morazán, reconocimiento que se otorga a personas por sus notables méritos en el ámbito cultural
Por: Luis Valenzuela
En una ceremonia cargada de significado y distinción, el exfuncionario federal y exaspirante a la Presidencia de la República, Marcelo Ebrard, fue condecorado con la prestigiosa Orden Francisco Morazán por el Gobierno de Honduras.
La presidenta de la nación centroamericana, Xiomara Castro, entregó personalmente la distinción en el grado de Gran Cruz Placa de Plata, resaltando así los notorios méritos y servicios eminente que el político mexicano ha brindado a lo largo de su carrera.
La Orden Francisco Morazán, también conocida como "Orden de Morazán", fue instituida por el gobierno hondureño el 1 de marzo de 1941, en honor al ilustre expresidente Francisco Morazán. Este reconocimiento se otorga a personas y representantes de la diplomacia, tanto nacionales como internacionales, en virtud de sus destacados servicios que han contribuido significativamente al bienestar de la humanidad o por sus notables méritos en el ámbito cultural.
En el marco de esta condecoración, Ebrard compartió su gratitud a través de sus redes sociales, destacando el honor de recibir la Orden Francisco Morazán de manos de la Presidenta Castro; en su mensaje, el político expresó sus sinceras felicitaciones en el segundo aniversario de la gestión de la mandataria al frente del Gobierno de la República hondureña.
La Orden Francisco Morazán es un símbolo de excelencia y compromiso con el servicio público, destacando a aquellos que han dedicado su vida a la promoción del bienestar social y cultural.
En este contexto, la distinción otorgada a Marcelo Ebrard resalta su contribución destacada en el ámbito diplomático y cultural, reconociendo así su valioso aporte a la cooperación entre naciones y al fortalecimiento de los lazos culturales que unen a las comunidades.
Este gesto de reconocimiento por parte del Gobierno de Honduras no solo destaca la figura de Marcelo Ebrard, sino que también subraya la importancia de fortalecer los lazos entre las naciones latinoamericanas y resalta la relevancia de la diplomacia y la cultura como instrumentos fundamentales para el progreso y la convivencia pacífica en la región.