La relación comercial entre México y China vuelve a tensarse. El gobierno chino expresó su rechazo a la reciente decisión del Congreso mexicano de aprobar aumentos arancelarios a productos provenientes de países con los que no existen tratados de libre comercio, una medida que entrará en vigor el 1 de enero de 2026.
Desde Pekín, el mensaje fue claro: China considera que este tipo de decisiones unilaterales afectan el comercio internacional y perjudican a los socios económicos de México.
CHINA ACUSA PROTECCIONISMO Y ADVIERTE IMPACTO COMERCIAL
El Ministerio de Comercio de China señaló que el país asiático “siempre se ha opuesto a los aumentos unilaterales de aranceles” y pidió al gobierno mexicano corregir lo que calificó como prácticas de unilateralismo y proteccionismo.
Un portavoz oficial confirmó que China ya tomó nota de las medidas aprobadas y aseguró que dará seguimiento puntual a su implementación para evaluar el impacto directo en sus exportaciones hacia México.
Aunque reconoció que México hizo ajustes respecto a la propuesta inicial presentada en septiembre con reducciones moderadas en aranceles para autopartes, bienes de consumo ligero, textiles y prendas de vestir, el gobierno chino advirtió que las nuevas tarifas seguirán afectando de forma significativa a sus socios comerciales.
POR QUÉ MÉXICO DECIDIÓ AUMENTAR LOS ARANCELES
Especialistas en comercio exterior explican que el aumento de aranceles forma parte de la estrategia de México rumbo a la revisión del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), prevista para 2026.
Estados Unidos ha presionado a sus socios para evitar que el acuerdo comercial sea utilizado como una vía indirecta para la entrada de productos originarios de China, Vietnam, Indonesia y otros países asiáticos. En este contexto, México busca reforzar sus controles comerciales y enviar una señal clara de alineación con las reglas de origen del tratado.
Actualmente, China es el segundo socio comercial de México y representa el 19.9 por ciento de las importaciones totales en lo que va del año, lo que explica la relevancia y sensibilidad de estas decisiones.
EL EFECTO COLATERAL: PÉRDIDA DE CUOTA EN ESTADOS UNIDOS
Aunque México logró aumentar el valor de sus exportaciones hacia Estados Unidos, analistas advierten que ha perdido participación en el mercado de importaciones, una situación que también afecta a China y Canadá.
Este escenario se da tras la reactivación de políticas arancelarias impulsadas por Donald Trump, que han modificado el equilibrio comercial en América del Norte y obligado a los países a replantear sus estrategias.
OTROS PAÍSES TAMBIÉN RESULTAN AFECTADOS
La medida mexicana no impacta únicamente a China. India también figura entre los países más afectados, en particular en el sector automotriz. De acuerdo con fuentes citadas por Reuters y documentos del sector industrial indio, las exportaciones en riesgo podrían alcanzar los mil millones de dólares.
Los aranceles a los automóviles pasarán de 20 a 50 por ciento, lo que golpea directamente a fabricantes como Volkswagen y Hyundai, que producen vehículos en India para exportarlos al mercado mexicano.
La Sociedad de Fabricantes Indios de Automóviles había solicitado a su Ministerio de Comercio intervenir para que México mantuviera los aranceles actuales, pero la petición no prosperó.
QUÉ CONSECUENCIAS ANTICIPAN LOS EXPERTOS
Analistas advierten que el aumento de aranceles podría encarecer productos importados, afectar cadenas de suministro y generar tensiones diplomáticas con socios clave. También existe el riesgo de represalias comerciales o ajustes en las estrategias de exportación de países afectados.
Además, el tema podría convertirse en uno de los puntos más delicados durante la revisión del T-MEC, especialmente en lo relacionado con reglas de origen y comercio internacional.
QUÉ SIGUE EN EL PANORAMA COMERCIAL
México aplicará los nuevos aranceles a partir de 2026, mientras China, India y otros países analizan posibles respuestas. Para los expertos, los próximos meses serán clave para observar si se abren canales de negociación o si el endurecimiento comercial marca una nueva etapa de tensiones en el comercio global.
El debate ya está sobre la mesa y todo indica que los aranceles serán un factor central en la redefinición de las relaciones comerciales de México en los próximos años.




