El regreso a clases no solo implica la compra de útiles, sino también una serie de gastos adicionales que pueden afectar el presupuesto familiar
Por: Andrés Manuel Contreras Alaniz
Con el inicio del ciclo escolar 2024-2025, millones de estudiantes en México regresan a las aulas, enfrentando, además, un desafío económico significativo para sus familias por la compra de nuevos útiles escolares.
Durante las vacaciones, los horarios y la rutina escolar suelen relajarse, y la vuelta a la normalidad puede traer consigo retos financieros, especialmente relacionados con el aumento de gastos para el regreso a clases.
La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) ha implementado medidas para ayudar a mitigar el impacto económico. Mediante su programa “Quién es Quién en los Precios”, la dependencia realiza un levantamiento especial de precios para útiles escolares, libros de texto, uniformes y calzado deportivo.
Esta información resulta valiosa para las familias, que pueden así planificar mejor sus presupuestos y realizar compras más informadas y económicas.
¿CUÁNTO SE GASTA AL INICIAR UN CICLO ESCOLAR EN MÉXICO?
En cuanto a los gastos promedio, se estima que las familias mexicanas gastan entre mil 500 y 2 mil 400 pesos por hogar al inicio del ciclo escolar, basado en datos del Inegi y Profeco.
Sin embargo, es importante recordar que el regreso a clases no solo implica la compra de útiles escolares, sino también una serie de gastos adicionales que pueden afectar significativamente el presupuesto familiar.
Además de los materiales básicos como lápices y cuadernos, las familias deben considerar otros elementos esenciales para la educación de sus hijos, como uniformes y actividades extracurriculares. En este sentido, las herramientas proporcionadas por la Profeco pueden ser de gran ayuda para comparar precios y encontrar las mejores ofertas.
Y es que los gastos adicionales varían según las políticas específicas de cada escuela. Estos costos, aunque no siempre son evidentes desde el principio, deben ser tomados en cuenta en la planificación familiar para evitar sorpresas financieras.
Con una planificación adecuada, las familias pueden gestionar estos gastos de manera más efectiva, asegurando que los estudiantes cuenten con todo lo necesario para un desempeño académico óptimo.
