En pasados días se hizo viral Malcapin, exconductor en Mexicali, debido a la forma en la que fue despedido en plena transmisión de su programa
Gustavo Macalpin, exconductor del programa Ciudadano 2.0 en Canal 66 de Mexicali, se ha convertido en un fenómeno mediático después de ser despedido en plena transmisión en vivo, un suceso que ha captado la atención de la opinión pública a nivel nacional. El director de la televisora, Luis Arnoldo Cabada, interrumpió el programa para comunicarle que su relación laboral con la empresa había finalizado tras siete años de trabajo, un anuncio que sorprendió tanto a Macalpin como a la audiencia.
El momento, capturado en video y viralizado en redes sociales, generó una ola de apoyo hacia el conductor, quien fue calificado por muchos usuarios como víctima de una humillación pública.
Entre los que se han manifestado en su favor se encuentra el abogado Guillermo Pous, quien ha ofrecido su respaldo legal para que Macalpin emprenda acciones contra la televisora por despido injustificado y daño moral.
GUSTAVO MACALPIN EN CDMX
A pesar de la controversia que rodea su despido, Macalpin parece estar mirando hacia el futuro con optimismo. A través de sus redes sociales, anunció que se encuentra en camino a la Ciudad de México para una entrevista de trabajo, afirmando que ya ha recibido varias ofertas laborales en la capital. "No hay mal que por bien no venga", recordó en una publicación, compartiendo la sabiduría de su madre en un momento difícil.
“Después de lo que ocurrió, llegué a casa devastado, pero tras conversar con mi esposa y mi madre, decidí seguir adelante. Estoy en el Aeropuerto de la Ciudad de México y planeo venir varias veces en las próximas semanas”, expresó Macalpin, quien se muestra decidido a aprovechar las nuevas oportunidades que se le presentan.
El incidente ha desatado un debate sobre las prácticas laborales en los medios de comunicación, con muchos críticos señalando la forma poco profesional en que se llevó a cabo su despido. El video que documenta su reacción ha sido compartido miles de veces, ejemplificando cómo las redes sociales pueden amplificar situaciones laborales delicadas y tener un impacto considerable en la percepción pública.
Mientras Macalpin se prepara para un nuevo capítulo en su carrera, su situación resuena como un llamado a la reflexión sobre la ética en el ámbito laboral, especialmente en un sector tan visible como el de la comunicación.
