La mítica artista de la música ranchera, continúa siendo un pilar esencial de la música popular de México
Por: Brayam Chávez
Lola Beltrán siempre será un exponente vigente de la música mexicana; su potente voz y su capacidad para transmitir emociones a través de sus canciones la convirtieron en un ícono de la cultura mexicana, cuyo legado perdura hasta el día de hoy.
Durante su trayectoria, Beltrán ha producido numerosos logros que continúan siendo fundamentales en la tradición musical de la nación; sin embargo, existen tres canciones que sobresalen sobre todas.
¿CUÁLES SON LAS 3 MEJORES CANCIONES DE LOLA BELTRÁN?
- Paloma negra: es otra de las canciones más icónicas e interpretadas de Lola Beltrán, una de las grandes exponentes de la música ranchera mexicana. Compuesta por el célebre autor y cantante mexicano José Alfredo Jiménez, "Paloma Negra" se ha convertido en un himno de desamor y dolor, característico de la ranchera tradicional.
- Cucurrucucú Paloma: Es una de las canciones más emblemáticas de la música tradicional mexicana, y su interpretación por Lola Beltrán es uno de los momentos más memorables en la historia de la música ranchera. La canción fue compuesta en 1954 por el músico y compositor mexicano Tomás Méndez, quien se inspiró en la figura del amor y la tristeza que caracteriza a muchos de los temas rancheros.
- Qué bonita es mi tierra: Por último, esta es una de esas melodías que encapsula el espíritu del pueblo mexicano. Esta melodía, con su tono festivo y patrio, representa un auténtico homenaje a la hermosura de México y sus costumbres. Este tema, interpretado por Lola Beltrán, se transforma en un festejo de la identidad nacional y continúa siendo un himno que vibra en corazones de todas las edades.
EL PODER DE TRANSMITIR EMOCIONES CON LA PASIÓN.
Con estas tres canciones, Lola Beltrán no solo demostró su habilidad en la ejecución de la música ranchera, sino también su habilidad para vincularse con las personas, elevar sus sentimientos a un nivel profundo y comunicar relatos que continúan impactando el espíritu de aquellos que las oyen. El valor de su herencia no solo reside en sus logros musicales, sino en la marca indeleble que dejó en el corazón de la población mexicana.
