Después de haber sido declarado culpable, el agente responsable de dar muerte al actor, recibió la condena correspondiente
Por: Luis Valenzuela
Tras una prolongada búsqueda de justicia, el oficial de policía Leopoldo Azuara, responsable del trágico fallecimiento del joven actor Octavio Ocaña, mejor conocido como "Benito" de la serie "Vecinos", ha sido condenado a más de 20 años de prisión por homicidio doloso y abuso de autoridad.
El fallo fue emitido el pasado 14 de diciembre en Cuautitlán Izcalli, poniendo fin a un doloroso capítulo para la familia Ocaña y arrojando luz sobre las circunstancias que rodearon la prematura partida del talentoso actor.
Octavio Ocaña perdió la vida el 29 de octubre de 2021, en un incidente que inicialmente sembró dudas sobre la responsabilidad del oficial de policía. Sin embargo, después de exhaustivas investigaciones y peritajes realizados por la familia del actor, se llegó a la conclusión de que fue el agente público quien acabó con su vida.
La hermana del actor, Bertha Ocaña, lideró una valiente y ardua batalla legal que culminó en la condena de Leopoldo Azuara a más de dos décadas de prisión.
La sentencia dictada por la juez contempla que Leopoldo Azuara cumplirá una condena de 20 años y 9 meses de cárcel por los delitos de homicidio doloso y abuso de autoridad, además, se le impuso una multa de hasta 42 mil pesos como parte de las repercusiones legales por sus acciones. Pero la responsabilidad del oficial no se limita únicamente a la privación de libertad, ya que también deberá cubrir los gastos generados por la familia de Octavio Ocaña.
Como parte integral de la reparación del daño causado por la partida del actor, Leopoldo Azuara deberá financiar las terapias psicológicas de las hermanas de Octavio, Bertha y Ana Leticia Ocaña. Este componente de la sentencia busca abordar las consecuencias emocionales y psicológicas que la trágica pérdida ha dejado en la familia, reconociendo así la dimensión completa del impacto generado por el acto delictivo.
PRESUNTO RESPONSABLE ESTÁ PRÓFUGO
Sin embargo, la justicia aún busca completar su curso, ya que un segundo sospechoso en el caso, el policía Gerardo Rodríguez García, se encuentra prófugo. Ante esta situación, se ha ofrecido una recompensa a aquellos que proporcionen información que conduzca a su captura, intensificando así los esfuerzos para llevar ante la ley a todos los involucrados en este lamentable episodio.
La conclusión de este juicio no solo marca un hito en la búsqueda de justicia para Octavio Ocaña, sino que también subraya la importancia de una sociedad vigilante y crítica que demanda responsabilidad y transparencia en el actuar de las autoridades.
La familia Ocaña, junto con sus seguidores y la sociedad en general, espera que este fallo contribuya a prevenir futuros abusos de autoridad y garantice la seguridad y bienestar de todos los ciudadanos.
