Se les recordó con aplausos, flores y velas en el monumento localizado en la Laguna del Náinari
Por: César Omar Leyva
En el “Jardín de la Esperanza” ubicado en la Laguna del Náinari en Ciudad Obregón, se llevó a cabo un homenaje para recordar y reconocer la valentía de niños, niñas y adolescentes que lucharon contra el cáncer y no lograron ganar la batalla.
Lo anterior como parte del cierre de las actividades del “Septiembre dorado”, una campaña de la asociación Amar y Servir con la que se buscó concientizar a la comunidad sobre la importancia de la detección oportuna del cáncer y los síntomas que pueden ser señales de alerta para su diagnóstico efectivo.
Emmanuel Ochoa, integrante de la asociación, dijo que el homenaje realizado en la laguna tuvo por objetivo recordar con afecto a los niños que han sido apoyados por la asociación y que lamentablemente, después de meses o años de lucha contra algún tipo de cáncer, perdieron la vida.
Informó que algunas de las familias de los niños asistieron al homenaje y otras más siguieron la transmisión por redes sociales debido a que viven fuera de la ciudad o les fue complicado participar de manera presencial.
En el homenaje se colocaron arreglos florales y veladoras alrededor del listón dorado luminoso que está en el llamado Jardín de la Esperanza donde los niños que tocan la campana, después de concluir su tratamiento, acuden a pintar su mano y plantar un árbol.
“Queremos recordarlos porque no se han ido del todo, porque su lucha nos enseñó muchas cosas y porque queremos que sus familias sepan que las seguimos acompañando. Quisiéramos que estuvieran físicamente aquí pero lamentablemente no los tenemos, sin embargo, vamos a prender unas velas por ellos”, dijo.
Los integrantes de Amar y Servir junto con familias de niños que están en tratamiento y de otros que lograron ganarle a la enfermedad, brindaron un minuto de aplausos en memoria de los pequeños que han fallecido en los últimos años.
Estuvieron presentes también los papás, hermanos y abuelos de Juan Manuel, un joven que luego de pelear contra la leucemia durante casi ocho años, terminó su batalla en noviembre de 2023, no sin antes haberse convertido en el voluntario más joven de Amar y Servir.
PLANEAN EMBELLECER EL JARDÍN
Diana Laura Enríquez, voluntaria de Amar y Servir dijo que planean en las próximas semanas realizar tareas de embellecimiento del Jardín de la Esperanza donde se ubica el monumento a los niños y niñas que tienen cáncer.
Entre las acciones a realizar se contempla el cambio de la placa metálica por una de piedra, pintura del cerco perimetral con apoyo de estudiantes que hacen servicio social, así como el sembrado de árboles para que pronto el espacio luzca más verde.
Mencionó que los integrantes de la asociación se turnan para dar mantenimiento y limpieza al Jardín y que invitan a la comunidad a visitar este espacio que está a la vista de todos al final de los puestos de cocos en la Laguna del Náinari.
