El Oomapasc dio a conocer que se aplican distintas estrategias para acabar con el robo de tapaderas de alcantarillas en el municipio
Por: Javier Zepeda
El robo de tapaderas de alcantarillas es una problemática que prevalece en algunas vialidades de Cajeme y que afecta la circulación de los automovilistas e incluso las labores de choferes de plataformas digitales como Uber y Didi, por lo que el Organismo Operador Municipal de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento de Cajeme (Oomapasc) informó que trabaja en resolver esta situación.
El pasado jueves 26 de septiembre, choferes inconformes acudieron al Palacio Municipal para dialogar con las autoridades. Una de las inquietudes que expusieron fue la falta de tapaderas en Cajeme, principalmente en la calle Cuauhtémoc, en el cruce con la Pascual Orozco y Cárdenas.
FALTAN CERCA DE 250
El director técnico de la paramunicipal, Fructuoso Méndez, dio a conocer que son alrededor de 250 las tapaderas que hacen falta en todo el municipio, las cuales deben ser repuestas, pero con otro tipo de material, para que los amantes de lo ajeno no se las lleven y las vendan a las chatarreras.
Durante el gobierno pasado, se implementó en Cajeme una estrategia que consistía en cambiar los brocales de fierro por cemento polimérico, sin embargo, se trata de un material que no es tan resistente, por lo que se hunden con los vehículos que transitan por las calles y resulta una medida contraproducente.
“La vida útil de ese material no es la deseable, se quiebran, se hunden y nos tapan los pozos, por lo que las queremos cambiar por tapaderas de acero dúctil, que es un tipo de acero ligero, que no les interesa a las personas que se roban el material para venderlo a las chatarreras”, adelantó.
El director técnico del Oomapasc informó que se había hecho un pedido de cerca de 300 brocales de cemento polimérico, pero fue suspendido para pedir de acero dúctil.