Acude al centro de Ciudad Obregón con la intención de obtener unas monedas para solventar sus gastos
Por: Oviel Sosa
Del ruido que provoca el vaivén de la gente y el tráfico, sobresale una armonía sutil que surge del talento y vocación por la música que posee Axel Esaú Murrieta Salido.
El joven es un amante del violín, un instrumento complejo para dominar. Axel se involucró en el arte a la edad de siete años, el primer contacto que tubo fue con el dibujo y la pintura.
“Mi mamá trabajaba de limpieza en una escuela de arte, yo tomaba clases de dibujo y pintura, después me involucré en la música, toqué el piano y posteriormente el violín”, compartió el joven de 20 años, originario de Ciudad Obregón.
Compartió que, al tener contacto con el violín, el instrumento lo sedujo y enamoró al grado de hacer un click especial, pues el sonido lo envolvió y motivó a aprender más de él.
En la banqueta de la calle Galena entre Miguel Alemán y Sinaloa, en pleno centro de Ciudad Obregón, ofrece un concierto lleno de sentimiento.
Con emoción sostiene el violín, a un costado coloca el estuche, en su interior pone una hoja en la que pide ayuda.
“Estudio la carrea de diseño gráfico en el Itson y pertenezco a la Orquesta Juvenil de Ciudad Obregón”, menciona.
Axel acude de manera frecuente a dicho punto en donde proyecta un sonido lleno de armonía a las personas que pasan por el lugar.
Su finalidad es obtener unas monedas y con ello ayudarse a costearse sus estudios universitarios, además que pretende seguir creciendo dentro de la música, pues es algo que lo apasiona e inyecta ánimo a su día a día.