A pesar de la belleza natural de los paseos ubicados rumbo a la presa, algunos visitantes arruinan la vista de los paisajes al arrojar basura
Por: Ana Jusaino
Pese a la belleza natural de los paseos ubicados rumbo a la Presa Álvaro Obregón “El Oviáchic”, algunos visitantes arruinan la vista de los paisajes al arrojar basura deliberadamente.
En un recorrido por los lugares denominados Los Álamos, La Isleta, El Coyote y el Dique 10, que se abastecen de la presa Álvaro Obregón, se encontraron una considerable cantidad de botes para que las personas coloquen la basura en su lugar. Sin embargo, a escasos metros de los contenedores había desechos como envases de cerveza, bolsas de frituras e incluso pañales para bebés en los tallos de los árboles.
Luis Ponce Vivanco, visitante de Guadalajara, comentó que desde muy temprano acudió al paseo Los Álamos, y preocupado por el medio ambiente, limpió su espacio de convivencia. Además, lleva su propio termo para evitar usar envases de plástico.
“Es una cultura general del ciudadano promedio en México; necesitamos empezar desde abajo para poder, a donde vayamos, reciclar nuestra basura o separarla al menos donde estemos conviviendo”, expresó.
Los encargados de los paseos informaron que la basura en espacios naturales puede ser un peligro para las especies que habitan en las aguas, así como para las que están en tierra. Además, indicaron que los vidrios pueden ser perjudiciales para los visitantes, quienes podrían lastimarse con ellos en los pies, piernas o manos. También destacaron que la basura inflamable puede causar incendios y que los desechos pueden convertirse en criaderos de moscas y mosquitos.
Además, a un lado de la carretera que conduce de Hornos hacia El Pueblito Kilómetro 9 y Comisaría de Esperanza hay letreros que indican a los ciudadanos que no deben tirar ningún tipo de envases de plástico ni de vidrio.
