Optimizan los buzos su funcionamiento al pescar en grupo
Por: Francisco Angulo
Un grupo de buzos que realiza la extracción callo de hacha en costas del sur de Sonora cuentan ya con sus brazaletes repelentes de tiburones con valor de 2 mil 500 pesos cada uno, que les fueron entregados en días pasados y que están probando para proteger su integridad física, manifestó el pescador José Francisco Paredes Otero.
El integrante de la Federación Pesquera Puerto Viejo con asiento en el municipio de Benito Juárez, mencionó que son 56 los dispositivos que recibieron a raíz de un convenio mediante el cual cada buzo aportó 500 pesos y el comercializador del producto puso una cantidad igual, mientras que entre el Ayuntamiento de Benito Juárez y Gobierno del Estado aportaron otros mil 500 para completar el costo total.
En los primeros días de uso, y para optimizar el funcionamiento de los brazaletes, los buzos están entrando juntos en bloque, en un radio de entre 100 metros a la redonda y utilizan dos por persona, uno en la muñeca y el segundo, en el tobillo, expuso Paredes Otero.
BAJA PRODUCTIVIDAD
Dijo que a raíz del mal tiempo de los últimos días, la extracción de callo se ha reducido, aunque con los tres o cuatro kilogramos que diariamente saca cada uno de los cerca de 40 buzos, y que entregan a razón de 700 pesos por kilogramo a un comprador local, es suficiente para sobrevivir.
Tanto Francisco Paredes como José Luis Reyes Bernal, presidente de la Sociedad Cooperativa de Producción Pesquera Rey Berna, comentaron que además de esta especie, algunos pescadores están saliendo por curvina, chano, mantarraya, jaiba y almeja.
Sin embargo, señaló Reyes Bernal, luego de haber iniciado hace unos días la veda del camarón, está por iniciar la de la mantarraya y posteriormente la de la jaiba, con lo que se reducirá más su margen de pesca y, por ende, sus utilidades.
