A nivel mundial se deben establecer políticas para aumentar el contenido orgánico en el terreno cultivable
Es urgente que a nivel mundial se destinen recursos para rescatar el suelo cultivable en el planeta.
“Salvemos el Suelo” (SaveSoil) es un movimiento global lanzado por Sadhguru, para hacer frente a la crisis del suelo,que ha reunido a personas de todo el mundo para abogar por la salud del suelo.
Y de acuerdo con datos de este organismo en 45 o 50 años podríamos acabar con el suelo cultivable en el planeta de no emprender acciones inmediatas para recuperarlo.
El nivel de micronutrientes en los alimentos ha bajado significativamente, un 90 por ciento, comparativamente con el principio del siglo veinte, además que si no e da un cambio la producción de alimentos se reducirá.
Se estima que para el 2045 la producción de alimentos caiga en un 40 por ciento debido a la degradación de los suelos, con una población de 9 mil 300 millones de personas.
Se busca en los próximos años agregar contenido orgánicoentre tres y seis por ciento mínimo para mantener al suelo vivo.
En la mayoría de los países más del 50 por ciento de la capa superior ha desaparecido.
“El hombre tiene que entender que la madre tierra es un organismo vivo y enfocarse en suelo y esto se tiene que dar en los próximos 25 años para tener resultados” señala el SaveSoil.
VALLE DEL YAQUI
Juan Manuel Cortés Jiménez, especialista en nutrición vegetal y suelos del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (Inifap), apuntó que se requiere invertir para avanzar en la recuperación de los suelos en el Valle del Yaqui.
“Cada vez hay mayor conciencia de la necesidad de mejorar su condición con modelos de agricultura sustentable, que se han desarrollado en el Campo Experimental Norman E. Borlaug (Ceneb), pero no es suficiente”, subrayó.
En los últimos años se han tenido avances, pues son más productores los que incorporan la paja de trigo a sus terrenos, evitando la quema que acaba con los microorganismos de la tierra y por ende con la fertilidad del suelo.
“Se tiene que invertir en maquinaria para la siembra directa de las más de 200 mil hectáreas de uso agrícola en el Valle del Yaqui y reducir el desgaste del suelo”, afirma Cortés Jiménez.
Cabe mencionar que la incorporación de la paja en el caso del trigo permite conservar los nutrientes del suelo, reduciendo además los costos de producción y elevando el rendimiento.