Crisis del campo obliga a los pequeños y medianos productores a dejar de sembrar
Tanto en el Valle del Yaqui, como en las comunidades yaquis creció el rentismo de tierras durante los últimos años.
Cesáreo Cota Tórtola, integrante del pueblo de Cócorit, ha manifestado que las tierras de la Tribu Yaqui están prácticamente rentadas y son muy pocos los que las trabajan.
Señaló que las tierras están en manos de los grandes terratenientes, toda vez que alrededor del 90 por ciento de las parcelas en las comunidades yaquis están rentadas.
Productores del sector social manifestaron que la falta de financiamiento y la nula política de apoyos los obliga a dejar de sembrar.
Este ciclo agrícola, señalaron, algunos productores que todavía se mantenían en la actividad optaron por no sembrar sus parcelas.
“Está el problema de la falta de financiamiento, ahora con el cierre de Financiera Nacional de Desarrollo (FND) y la caída del precio de trigo en el mercado internacional los obliga, se descapitalizó al sector”, coincidieron en señalar.
Ni la Federación, ni el Estado cumplen sus funciones para impulsar el crecimiento del sector agropecuario en México, lamentaron.
Este panorama de olvido por parte de las autoridades los orilla a dejar la actividad, pero se está afectando principalmente a los pequeños y medianos productores, que no tienen capacidad para invertir, que dependen del crédito de avío, con tasas de interés bajas, que no son las que tiene la banca comercial, indicaron.
Los productores no tienen la certidumbre de un precio rentable para la producción, como se presentó en ciclo 2022-2023 con el trigo, principal cultivo en el Valle del Yaqui, señalaron.